La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, y su rival republicano, Donald Trump, llegan virtualmente empatados a su esperado primer debate de hoy, según un sondeo nacional publicado ayer por Washington Post y ABC News.
Clinton es respaldada por el 46 % de los votantes probables consultados, frente al 44 % de Trump, y el resto se lo reparten los candidatos minoritarios, Gary Johnson (5 %), del Partido Libertario, y Jill Stein (1 %), del Partido Verde.
Entre los votantes registrados, Clinton y Trump empatan con el 41 %, Johnson tiene un 7 % y Stein un 2 %.
Si solo se pregunta por los dos principales candidatos, Clinton supera a Trump con un 49 % frente a 47 % entre los votantes probables y ambos empatan con un 46 % entre los votantes registrados.
Por otra parte, la expectación se encuentra alimentada por el polarizado clima electoral tras una campaña agresiva que no se ha caracterizado especialmente por su limpieza y la reñida contienda, que en las últimas encuestas apuntan una reducción del margen de ventaja de Clinton, muy cerca del empate técnico.
Preparación
A tan solo horas del debate, que tendrá lugar en Long Island, ambos candidatos tienen previsto pasar la jornada trabajando en sus declaraciones y en los posibles escenarios que podrían producirse en los 90 minutos de debate sin interrupciones publicitarias.
Incluso en este aspecto, el contraste es evidente.
Si Clinton lleva días concentrada en el cara a cara, Trump ha dejado esto para el último momento, y el sábado realizó un evento de campaña en Roanoke, Virginia.
“Ella (Clinton) va a tratarme con respeto. Yo voy a tratarla con respeto”, dijo Trump en una entrevista esta semana.
Mexicanos contra Trump
Activistas de la organización Avaaz llamaron ayer en México a los estadounidenses residentes en aquel país a votar contra Donald Trump en las elecciones de noviembre, por considerar que el republicano es “una amenaza global”. Con una manifestación en el Ángel de la Independencia de la Ciudad de México, la agrupación continuó su “caravana anti-Trump”, orientada a “movilizar a los votantes de EE.UU. que residen en el exterior”, explicó Joseph Huff-Hannon, representante de Avaaz.